De entre muchas cosas, el ser humano se diferencia uno de otro por su temperamento, carácter y personalidad. Cuando un niño nace éste hereda ciertas características inherentes de sus padres, lo cual conocemos como el temperamento; pero su carácter se desarrolla a lo largo de su vida, lo mismo que su personalidad.
De entre muchas cosas, el ser humano se diferencia uno de otro por su temperamento, carácter y personalidad. Cuando un niño nace éste hereda ciertas características inherentes de sus padres, lo cual conocemos como el temperamento; pero su carácter se desarrolla a lo largo de su vida, lo mismo que su personalidad.
De entre muchas cosas, el ser humano se diferencia uno de otro por su temperamento, carácter y personalidad. Cuando un niño nace éste hereda ciertas características inherentes de sus padres, lo cual conocemos como el temperamento; pero su carácter se desarrolla a lo largo de su vida, lo mismo que su personalidad.
TEMPERAMENTO: Es la combinación de características con las que nacemos: CARÁCTER: Denota el verdadero “yo”. Es el resultado de nuestro temperamento natural modificado por la educación, cultura, actitudes, creencias, principios y motivaciones recibidas en la infancia. PERSONALIDAD: Es la expresión externa de la persona, que puede ser o no lo mismo que el carácter, dependiendo de lo genuino que seamos. Con frecuencia, la personalidad es una agradable fachada que esconde un carácter desagradable o débil. LA RESPONSABILIDAD DE DESARROLLAR NUESTRO CARÁCTER CRISTIANO