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La consultoría en situaciones particulares

Esterilidad e infertilidad del matrimonio

Maria Luisa Di Pietro


Pontificio Instituto Juan Pablo II – Ciudad del Vaticano
Universidad Católica del «Sacro Cuore» - Roma
Esterilidad e infertilidad

 Un matrimonio es considerado estéril sólo después de que hayan


transcurrido uno o dos años sin verificarse una concepción
deseada, siempre que en este período hayan mantenido relaciones
sexuales frecuentes, regulares y sin usar anticonceptivos.
 Un matrimonio es considerado infértil cuando sí es capaz de
concebir, pero no de llevar adelante el embarazo al menos hasta
el momento en que se pueda garantizar la supervivencia
extrauterina del feto.

Un matrimonio estéril no es fecundo


Un matrimonio infértil no es estéril
La esterilidad: su incidencia

 el 14-15% de los matrimonios son


clasificados como «estériles»
 el 70% de esas «parejas estériles»
podrían tener un embarazo si adoptaran
una conducta de cuidadosa valoración de
sus factores de esterilidad y se
sometieran a una terapia adecuada.
 el 30% restante, sí presenta una
esterilidad no superable.

 30% por causa masculina


 30% por causa femenina
 10% mixta
 25% no explicada
 5% otros
Los factores de riesgo

Aumento de edad del primer embarazo


(y declinación de la capacidad
reproductiva)
Enfermedades transmitidas por vía sexual
Uso de anticonceptivos y/o abortivos
Polución ambiental de la vida y el trabajo
Tabaco, alcohol, alimentación, estrés...
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2 4 1

Los seis factores de esterilidad

1. El factor ovárico
2. El factor espermático
3. El factor tubárico
4. El factor uterino
5. El factor cervical
6. El factor vaginal
La consultoría con el matrimonio estéril
La consultoría con el matrimonio estéril

Pre-diagnóstica Post-diagnóstica

 anámnesis
 comunicación del diagnóstico
 examen objetivo (general,
 elección de la terapia
ginecológico, andrológico)
(farmacológica, hormonal,
 investigaciones hormonales, quirúrgica, psicológica, ayuda
microbiológicas, morfológicas, al acto conyugal)
instrumentales...
 la propuesta de las técnicas
de fecundación artificial
La consultoría con el matrimonio estéril

 La consulta tiene un rol fundamental y


presenta características diferentes a otros
tipos de conejo
dentro del mismo ámbito obstétrico-
ginecológico.

 El responsable de la consulta no se reúne con


un paciente, sino con un matrimonio:
- se habla con el matrimonio;
- se estudia con el matrimonio
- se invita al matrimonio a eventuales
tratamientos.

La esterilidad es un hecho del matrimonio.


¿Una consultoría de diagnóstico clínico?

El consejero no atiende solamente


a los aspectos técnicos, porque tiene ante sí
a un matrimonio emocionalmente estresado
que no sólo solicita un diagnóstico clínico,
sino que también pide ayuda para afrontar el sufrimiento
que genera el deseo de un hijo
y los fracasos y las inevitables desilusiones
que han encarado hasta el momento
en la búsqueda de una solución.
La consultoría psicológica. 1

La experiencia de la esterilidad
suscita en el matrimonio las mismas
reacciones
que otras situaciones de crisis:
sopresa, shock, incredulidad, negación,
frustración, pérdida de control,
ansiedad, sentimiento de culpa,
angustia, disgusto, aislamiento,
depresión, aflicción, duelo.
Esta crisis puede volverse crónica
por la repetición de eventos
negativos
y la dificultad de encontrar una
solución.
La consultoría psicológica. 2

La crisis puede asumir características diferentes


en el hombre y en la mujer,
en el cónyuge estéril y en el cónyuge fertil.
Esto puede influir en la relación del matrimonio,
considerado no tanto como una unidad homogénea,
cuanto como una unidad formada por dos individuos
con diferentes reacciones y comportamientos.
La consultoría ética
Ante la necesidad de hacer una elección
y de tomar una decisión en el ámbito médico,
hay siempre una fase de “in-decisión” durante la
cual
es necesario valorar todos los aspectos de la
realidad.

En esta dimensión se garantiza


la calidad humana de la decisión misma,
evitando que se trate de una decisión
simplemente técnica.

La consultoría ética representa, por lo tanto,


el ámbito donde plantear las cuestiones éticas
que las soluciones propuestas implican
y obtener todos los elementos cognoscitivos
con los que fundamentar la decisión que se va
a elegir.
La consultoría ética
El problema ético

 Terapeuticidad y fecundación artificial

 La dignidad y el respeto del embrión humano

 La desestructuración de la familia

 La despersonalización de la procreación humana

 El sufrimiento por la esterilidad conyugal


¿Las tecnicas de fecundación artificial son una terapia?

 A FAVOR: Las TFA son una terapia


porqué permiten superar una
condición patologica como la
esterilidad

 EN CONTRA: Las TFA no son una


terapia porqué no permiten superar
una condición patológica como la
esterilidad, sino simplemente
sustituyen el acto generativo dando
al matrimonio estéril el hijo deseado.
Los partidarios del “sí”

Si las TFA son una


terapia,
su uso está siempre
legitimado,
y también está
justificado
el apoyo económico de
parte del Estado.
Los partidarios del “no”. 1

Si las TFA no son una


terapia,
es posible un uso amplio,
aunque restringido.
Los partidarios del “no”

Si las TFA no son


una terapia, su uso
nunca es lícito.
¿Cómo se pueden definir las TFA?

¿Tratamientos paliativos?
¿Una nueva modalidad de procreación?

No. Son una involución de la generación


humana
Dignidad y respeto del embrión humano

 El estatuto del embrión humano


 La pérdida de embriones
 La congelación de los embriones
 El diagnóstico preimplantatorio
 La experimentación con
embriones
El estatuto biológico

La interacción entre dos sistemas celulares diferentes


y teleológicamente programados (óvulo y espermatozoide) da
origen a:
 un “nuevo sistema”, que no es la suma de los dos
subsistemas, sino un sistema combinado que actúa como
una nueva unidad (one-cell embryo), intrínsecamente
determinada para lograr su forma específica final
(unitotalidad)
 un “nuevo genoma”, que es el centro biológico y la
estructura coordinadora de la nueva unidad. Información
esencial y permanente para la gradual
y autónoma realizacion de un diseño-proyecto bien
definido
El estatuto antropológico
¿ Que y quien es la persona humana?

 Hasta hoy: Rompeolas (“spartiacque”) entre lo humano y lo no


humano, entre lo lícito y lo ilícito

 Hoy: Nuevos conceptos que interpretan el término de forma


distinta:

INTERPRETACIÓN FUNCIONALISTA-ACTUALISTA: Quien


tiene determinadas cualidades o funciones---> diversas teorías

INTERPRETACIÓN SUSTANCIALISTA O DEL


PERSONALISMO ONTOLÓGICO: Quien tiene naturaleza
humana, en la que se puede distinguir la cualidad primera
(sustancia) y la cualidad segunda (accidente)
Las formas de tutela

TUTELA EN SENTIDO DÉBIL


Tutela gradual
Derechos “prima facie”

TUTELA EN SENTIDO FUERTE


Defensa de la vida física
Defensa de la integridad genética
Promoción de la salud
El tuciorismo
La tutela en sentido fuerte
NO A:

 Investigación/experimentación sobre embriones vivos, viables o


no, implantables o no;
 Creación de embriones para uso de investigación/experimen-
tación;
 Creación de seres humanos idénticos a través de la fisión gemelar
o la clonación;
 La denominada “clonación terapéutica”;
 Creación de quimeras a través del empleo de un embrión no
humano o la implantación de un embrión humano en el útero de un
animal; los intentos de ectogénesis total;
 Diagnóstico preimplantatorio;
 Comercialización de embriones humanos con objetivos científicos
o industriales;
 Técnicas de fecundación artificial que puedan representar una
ocasión de manipulación y/o supresión del embrión humano.
La desestructuración de la familia

La donación de gametos masculinos y/o femeninos


o de embriones

El matrimonio y sus finalidades

 La madre de alquiler

La fragmentación de la maternidad y paternidad

 El riesgo para la familia


La estructura unitaria del matrimonio

Con el recurso a la fecundación artificial heteróloga


se compromete la estructura unitaria del matrimonio,
porque se viola el “derecho exclusivo de los esposos
a ser padre / madre sólo el uno a través del otro”.
Esto quiere decir que, aunque los cónyuges se pusieran de
acuerdo para recurrir a la fecundación heteróloga,
sigue teniendo siempre carácter alternativo
a la unidad esponsal parental,
como consecuencia de la donación de gametos.
La madre de alquiler

La aportación de la madre de alquiler (la relación


entre una mujer y el niño durante el embarazo)
El derecho del niño a mantener la relación con su
madre en la vida postnatal.
El derecho del niño a un pasado propio al que poder
referirse para definir su propia identidad.
El sufrimiento de la mujer (un útero, no un rostro)
El riesgo para la familia

 El hijo puede tener no ya dos padres sino tres e incluso cinco, con
indudables repercusiones de carácter psicológico sobre el niño (“¿de
quien soy hijo?”)
 Los “padres” y la familia resultan perturbados por esta pluralidad de
progenitores (el concepto de familia pasa a representar ya sólo un
modo de interpretar y ordenar un conjunto de relaciones, sin
referencia alguna a los vínculos jurídicos o sin consanguinidad)
 La posibilidad de conflictos intraconyugales a nivel inconsciente
especialmente en el padre social
 La donación del semen y óvulos, la tendencia eugenésica (adquisición
de gametos seleccionados)
Las complicaciones de la donación de gametos

 La posibilidad de uniones incestuosas entre


hijos provenientes de mismo donante
(fecundación con una sola emisión de semen
a un número considerable de mujeres que
viven en la misma región o ciudad)
 La posibilidad de la inseminación artificial o
la fecundación in vitro en una mujer
homosexual, en una viuda o una mujer
soltera (el niño deberá vivir en una familia
con una sola figura parental).
 La posibilidad de que con espermatozoides
conservados mediante congelación se pueda
conseguir que nazcan niños concebidos
después de la muerte de su padre genético
(el niño es huérfano antes aún de ser
concebido)
La despersonalización de la procreación humana

¿El deseo de un hijo? ¿El derecho a un hijo?

* el deseo es por su naturaleza insaciable,


mientras el derecho es circunscrito y delimitado
* el deseo manifiesta una aspiración personal,
mientras el derecho supone una relación interpersonal.

-> El derecho del niño:


 a nacer de un acto de amor
y donación de sus padres…
 a ser esperado como un don…
Los padres “artificiales”

Con la fecundación artificial


el niño ya no es concebido por un acto de amor:
los padres fabrican los gametos,
pero es el médico el que hace que se encuentren.
El verdadero padre es el médico
(Edwards y Steptoe… son los padres de Loius Brown!)

La concepción in vitro es el resultado


de la acción técnica que antecede a la fecundación
no la expresión de un acto específico de la unión conyugal
El acto conyugal

 El acto conyugal (unitivo y procreativo) es el único lugar digno donde


llamar a la existencia a un ser humano.
 El punto de partida no es un concepto biologicista de la ley natural,
porque la naturaleza es en sentido metafísico (unidad intrínseca de
espíritu y de cuerpo)
 La ley biológica siempre se cumple en la fecundación artificial,
lo que no se respeta es la ley moral natural que obliga a considerar
al hombre como persona en su totalidad, y al acto procreador como
expresión del espíritu y del amor personal en la corporeidad que se
da.
 Lo que se rechaza no es la técnica ni la aplicación de la tecnología a
la corporeidad humana, sino el hecho de que este tipo de práctica
introduce una separación y un dualismo entre la dimensión biológico-
fecundante y la dimensión espiritual del “yo” esponsal.
La intervención médica

Sustituir el acto conyugal, tanto en la unión como en


la procreación (todas aquellas técnicas que utilizan
esperma conseguido fuera del acto conyugal y
comportan la fecundación tanto fuera como dentro
del organismo femenino).
Completar un acto conyugal que de por sí no lleva a la
concepción (la fecundación debe realizarse en el
organismo de la mujer; el semen debe ser conseguido
en el ámbito de un acto conyugal).
El riesgo de la fecundación artificial

(a) para la mujer


* síndrome de hiperestimulación ovárica
* tumor epitelial del ovario (?)
* extracción/transferencia de las células huevo

(b) para el embrión/feto


* dificultad de implantación en el útero
* anomalías cromosómicas de las células huevo y embrión
* micromanipulación de gametos [anomalías cromosómicas;
malformaciones congénitas]
* embarazos múltiples y reducción fetal
* embarazos ectópicos
* inmadurez (> 4 veces)  SFD
La consultoría ética: una experiencia
La consultoría ética
Una experiencia
 La consulta ética la solicitaron parejas con una edad media en el
momento de la consulta de 32.5 años

 Esas parejas solicitaron la consulta ética por la siguientes razones:

1. búsqueda de una aproximación holística a la esterilidad;


2. deseo de recibir explicaciones y de elaborar su perplejidad y sus
miedos;
3. profundización en su conocimiento de la esterilidad y las eventuales
intervenciones para superarla;
4. insatisfación ante experiencias pasadas con las técnicas de
fecundación artificial;
5. desacuerdo en la pareja respecto a la elección procreativa;
6. necesidad de confrontar las proprias posiciones éticas.
La consultoría ética
El procedimiento

La aproximación autoritaria: coloca los valores morales del


consultor por encima de los de los que consultan, que se ven
excluídos de la decisión ética.

La aproximación de la simple facilitación: busca un consenso


recurriendo a terceras partes que se muestran parciales,
incluso a costa de violar el derecho a decidir del paciente.

La aproximacion de la facilitación ética: ayuda a los que


consultan a identificar y analizar la naturaleza de las dudas
y de los conflictos morales, facilitando la construcción de un
consenso entre todas las partes involucradas.
La consultoría ética
La aproximación de la facilitación ética

 una aproximación a la esterilidad de la pareja no sólo tecnica, sino


que tambien presta atencion a la totalidad de la persona y a todas
las personas involucradas;
 conlleva ayudar a las parejas a manejar sus proprias emociones
durante el proceso de decisión;
 debe valorar todos los aspectos relevantes para una elección
autónoma e informada de la pareja;
 conviene definir previamente y clasificar los terminos lingüísticos
y simbólicos que se van a utilizar;
 también identificar los principios éticos mas relevantes al caso;
 valorar las diversas alternativas, con la discusión y justificación
racional de la elección que parezca éticamente más adecuada.
La consultoría ética
Los resultados. 1

La primera fase ha sido «narrativa».


Esta narración ha permitido individuar
una serie de factores:

1. El factor de frustración (el ser estériles)


2. El factor médico (investigación aún incompleta)
3. El factor «ignorancia»
4. El factor moral
La consultoría ética
Los resultados. 2

La segunda fase es la del «dialogo»


entre el consultor y la pareja.

El consultor se ha de mostrar abierto al acompañamiento


y facilitar la solución del conflicto.

Se ha de intentar restituir a la pareja


la certeza de que son verdaderos protagonistas
de su búsqueda de una solución a la esterilidad
y no simples «proveedores de gametos»
El sufrimiento por la esterilidad conyugal

 El legítimo deseo de paternidad y maternidad


 La fecundidad en la esterilidad

“La esterilidad física, en efecto,


puede ser ocasión para los esposos
de hacer otros importantes servicios
a la vida de las personas humanas,
como son, por ejemplo, la adopción,
los varios tipos de labores educativas,
la ayuda a otras familias,
a los niños pobres o minusválidos"
(FC 14 / DV, II.8)
Fecundidad en la infertilidad
No es solo una cuestión semántica. 1

 La fecundidad biológica hace referencia a la posibilidad o no que


tiene una pareja de engendrar, de dar origen a una nueva vida

 La fecundidad biológica se refiere también a la condición en la que


la mujer se puede encontrar en relación con las fases del ciclo
menstrual: los cambios en la producción de estrógenos y
progesteronas, la maduración gradual del folículo ovárico, la
explosión del folículo ovárico con la liberación del óvulo, la
modificación de la estructura del endometrio, las modificaciones del
moco cervical, marcan el tiempo y los tiempos de la fecundidad
biológica.
No es solo una cuestión semántica. 2

 La fecundidad espiritual, aunque comprende también la fecundidad


biológica, abarca un ámbito mucho más amplio que no incluye
necesariamente la primera.
 La fecundidad espiritual es la capacidad de amar, de cuidar del otro, de
percibir sus necesidades; emana del corazón y no exige necesariamente
una generación física.

A veces, la fecundidad biológica y la fecundidad espiritual no coexisten.


Ser biológicamente fecundos no implica necesariamente
-o puede no implicar- la fecundidad espiritual.
Se puede engendrar físicamente un hijo, y al mismo tiempo
ser incapaz de engendrarlo en el amor y en el cuidado.
Del mismo modo, la fecundidad espiritual
puede darse también sin la fecundidad biológica.
El fundamento de la fecundidad

 El fundamento de la fecundidad es el amor, ese amor que brota de


“un corazón que ve” [DCE, 31] dónde hay una necesidad, y obra en
consecuencia. No es, por tanto, el simple trasvase de instintos y de
sentimientos, porque, aunque los sentimientos son estados afectivos
estables, profundos y duraderos, estos no son suficientes para
describir la experiencia del amor: “Los sentimientos van y vienen.
Pueden ser una maravillosa chispa inicial, pero no son la totalidad del
amor” [DCE, 17].

 Para poder “ver”, el corazón debe conocer el origen de la propia


historia: no se puede vivir sin la conciencia de que nuestro amor nace
de un Amor que nos precede, del Amor de ese Dios que “nos ha
amado primero y sigue amándonos primero” [DCE, 17].
El fundamento de la fecundidad

¿Qué hace posible que vivamos esta dinámica del amor?

La respuesta viene recogida en la Exhortación Apostólica


Familiaris consortio: “En cuanto espíritu encarnado, […]
el hombre está llamado al amor en su totalidad unificada.
El amor abarca también el cuerpo humano
y el cuerpo se hace partícipe del amor espiritual”
(FC 11)
Cuerpo humano, cuerpo personal

El cuerpo humano, que es un cuerpo personal y sexuado:

es el signo y el lugar de la apertura, del encuentro y del


diálogo;
es la expresión de la persona íntimamente orientada al don y
al amor, a la fecundidad en la conyugalidad o en la virginidad;
tiene la capacidad de manifestar la vocación al amor, la
tensión al don recíproco, al ser y existir como don “con” y
“para” alguien; tiene un significado profundamente esponsal.
El Amor y el don

 En la dinámica del amor está inscrita, por tanto, la posibilidad de hacerse don.
Y no podría ser de otra manera. Descubrir que uno es amado hasta el punto de
haber sido creado y engendrado, lleva a amar y a abrirse al don.

 Que un regalo sea don no depende solo de su materialidad, sino sobre todo de
su ser portador de significado, de sentido y, por tanto, de relaciones, de
intenciones significativas en las que se expresan lazos, vínculos. En el momento
en el que “se es don” (no se dona algo, sino que se dona uno mismo), se
comprende que este don debe ser total, recíproco y exclusivo.

 Tanto el don de uno mismo en la unión conyugal, como el don de la vida en el


donarse de los cónyuges, como el don de la propia vida en la virginidad, todo
viene del amor y, sobre todo, de aquel Amor primero con el que Dios ha querido
y quiere al ser humano.
L
La fecundidad para la vida
La doble generación

 La primera generación es el don de la vida; su ámbito propio es el


acto conyugal.

 La segunda generación es la educación: “La fecundidad del amor


conyugal no se reduce sin embargo a la sola procreación de los hijos,
aunque sea entendida en su dimensión específicamente humana: se
amplía y se enriquece con todos los frutos de vida moral, espiritual y
sobrenatural que el padre y la madre están llamados a dar a los hijos y,
por medio de ellos, a la Iglesia y al mundo” (FC, 28). La tarea de
educar a los hijos se considera como una prioridad ontológica, que
forma parte de la misma naturaleza de la generación: “Los padres -
escribe Juan Pablo II en la Carta a las Familias- son los primeros y
principales educadores de sus propios hijos, y en este campo tienen
incluso una competencia fundamental: son educadores por ser
padres”.
La fecundidad como recurso. 1

La fecundidad de la familia, entendida como disponibilidad a amar y a


percibir las necesidades del otro, va más alla de las dos primeras e
inmediatas manifestaciones: la generación y la educación. En la
acogida a los ancianos, en la asistencia a los enfermos, en la ayuda a
las personas con discapacidad, en el consolar a aquellos que sufren,
en “cada acto de verdadero amor al hombre testimonia y
perfecciona la fecundidad espiritual de la familia, porque es
obediencia al dinamismo interior y profundo del amor, como donación
de sí mismo a los demás” (FC, 41).
La fecundidad como recurso. 2

Una fecundidad para la vida es una fecundidad que supera los


confines de la familia para llegar a toda la sociedad. Una fecundidad
que abre horizontes y que multiplica las modalidades de
participación de la familia: en la escuela, en la política, en las
asociaciones, en los servicios a los más desfavorecidos, en el cuidado
de los más pequeños y de los más mayores, de la propia familia y de
otras familias.
Con una incesante creatividad “fruto maravilloso del Espíritu de
Dios, que abre el corazón para descubrir las nuevas necesidades y
sufrimientos de nuestra sociedad”. Un corazón que “ve”, según la
expresión de Benedicto XVI.
Educar para la fecundidad. 1

 En la tarea de educar para la fecundidad, además de los padres


biológicos, están llamados a participar otras personas. Es una especie
de generación espiritual: “La generación espiritual es -escribe Karol
Wojtyla en Amor y responsabilidad- la prueba de una plenitud
espiritual que desea compartirse. Por esto se buscan hombres, sobre
todo más jóvenes, dispuestos a aceptar lo que se les quiere comunicar
y que se convierten así en “hijos”, objetos de un amor particular,
parecido al de los padres hacia su prole por una razón parecida: lo que
maduró en el padre y la madre espirituales continuará viviendo en
ellos”.

 Una forma muy especial de paternidad espiritual es la paternidad


adoptiva: engendrar “con el corazón”, colmando así la necesidad de
una familia que tiene cualquier niño.
Educar para la fecundidad. 2

 Aunque la disponsición a amar sea innata al ser humano, es necesario hacerla emerger,
darla a luz: “Una educación verdadera - escribe Benedicto XVI - debe suscitar la valentía
de las decisiones definitivas, que hoy se consideran un vínculo que limita nuestra libertad,
pero que en realidad son indispensables para crecer y alcanzar algo grande en la vida,
especialmente para que madure el amor en toda su belleza; por consiguiente, para dar
consistencia y significado a nuestra libertad” (Discurso a los participantes al IV Congreso
Nacional de la Iglesia italiana el 19 de octubre de 2006) .

Educar a la luz de una Verdad sobre el hombre, que no se debe dejar cristalizar como hace
el agua a gran altura, permaneciendo inaccesible y solo alcanzable para algunos con gran
esfuerzo. La educación es comparable al riego de la llanura que se produce tras derretirse
la nieve de las montañas: no como una avalancha que desciende por el valle, sino como un río
que sorprende por su frescura. Como el Amor.
FIN

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