pensamiento y emociones Paisajes del pensamiento. La inteligencia de las emociones Upheavals of Thought. The intelligence of Emotions (2001) Marta Nussbaum Nació en New York en 1947
Estudió teatro y lenguas clásicas en la Universidad de
New York (NYU) 1969), y filosofía en Harvard en 1972.
Ha enseñado filosofía, letras y estudios clásicos en
Harvard, Brown, Chicago y otras importantes Universidades en el mundo.
Desde los años 70’ ha participado en importantes diálogos
y discusiones sobre ética, con autores como Judith Butler, Alan Bloon. Siempre en diálogo y disputa con la filosofía de John Rawls.
En los años 80’ trabajó junto al economista premio nobel,
Amartya Sen, en la teoría de las ‘capabilities’. Marta Nussbaum • Tiene numerosos libros, entre ellos: • La fragilidad del bien: fortuna y ética en la tragedia y la filosofía griega (The Fragility of Goodness), (1986). • El cultivo de las humanidades (Cultivating Humanity: A Classical Defense of Reform in Liberal Education (1997). • Mujer y desarrollo humano (Women and Human Development (2000). • Paisajes de pensamiento. La inteligencia de las emociones. (Upheavals of Thought: The Intelligence of Emotions (2001). • El ocultamiento de lo humano: repugnancia, vergüenza y ley (Hiding From Humanity: Disgust, Shame, and the Law (2004). • Sin fines de lucro. Por qué la democracia necesita de las humanidades (Not for profit: why democracy needs the humanities (2010). • Emociones políticas : ¿por qué el amor es importante para la justicia?Political emotions : why love matters for justice (2013). Upheavals of Thought: The Intelligence of Emotions (2001). • EPÍGRAFES • “Es difícil comprender hasta qué punto aquella inquietud agitaba y había enriquecido, por eso mismo, la mente de M. de Charlus. El amor suele provocar auténticos levantamientos geológicos del pensamiento. En el de M. de Charlus, que unos días antes se parecía a una llanura tan uniforme que ni en el horizonte más remoto se habría conseguido divisar una sola idea a ras de suelo, habían surgido de improviso, duras como la piedra, un macizo de montañas, pero de montañas tan esculpidas como si algún estatuario, en lugar de llevar el mármol, las hubiese cincelado allí mismo, y en ellas se retorcían, en grupos gigantescos y titánicos, La Furia, los Celos, la Curiosidad, la Envidia, el Odio, el Sufrimiento, el Orgullo, el Espanto y el Amor.” • MARCEL PROUST, A la busca del tiempo perdido Upheavals of Thought: The Intelligence of Emotions (2001). • EPÍGRAFES • “Así, el nacimiento representa el paso desde un narcisismo que se basta por completo a sí mismo a la percepción de un mundo exterior variable y al primer descubrimiento de objetos. De esta transición, demasiado radical, resulta que no somos capaces de soportar durante mucho tiempo el nuevo estado creado por el nacimiento y nos evadimos periódicamente de él, para hallar de nuevo en el sueño nuestro anterior estado de impasibilidad y aislamiento del mundo exterior.” • SIGMUND FREUD, Psicología de las masas y análisis del yo Preguntas guía • ¿ Qué son las emociones? • ¿Cómo se relacionan con el pensamiento? • ¿Cómo nos ayudan a conformar nuestro mundo individual, intepersonal y social? • ¿Qué teoría de las emociones está intentando combatir la autora? • ¿Qué teorías de las emociones han existido en la historia del pensamiento occidental y cómo se sitúa frente a ellas la teoría de la autora? • ¿Cuál es la base de su teoría de las emociones cognitivo- evaluativa que defiende la autora? • ¿Qué problemas actuales nos permite abordar esta teoría? ¿Qué son las emociones?
• “Las emociones conforman el paisaje de nuestra vida mental
y social”. • “Como los «levantamientos geológicos» que un viajero puede descubrir en un paisaje donde hasta hace poco sólo se veía una llanura, imprimen a nuestras vidas un carácter irregular, incierto y proclive a los vaivenes”. (p. 21) • ¿Levantamientos geológicos del pensamiento? (epígrafe Proust) • ¿Qué quiere decir? ¿Qué carateriza (según el sentido común) a las emociones • a) El calor de las emociones, los síntomas físicos que las acompañan; • b) Su urgencia, la manera en que exigen la atención del sujeto; • c) Su capacidad de moldear y dirigir la personalidad • d) Cierto impulso a la acción, al menos en algunas emociones. • e) Las relaciones que establecen con objetos que se consideran importantes, ya sea para la propia vida o en general; • f) Un cierto sentimiento de pasividad, de que la emoción no es algo que hago sino a lgo que me ocurre; • g) Una aparente oposición a la racionalidad: nos impulsan a tomar cursos de acci ón que pueden no ser los recomendados por una racionalidad reflexiva de tipo cos -to/bene-ficio. • h) La capacidad de las emociones de darse origen unas a otras, de desencadenarse y acompañarse,que algunas emociones entren como componentes en otras, e incl uso que en ciertas emociones entren algunos apetitos, etc. Las emociones, como los pensamientos en general, parecen ser bastante promiscuas: admiten relaciones con todos los elementos de la vida mental. ¿Emociones impulsos irracionales contrarios al pensamiento ? • “¿Será porque las emociones son energías o impulsos de carácter animal sin conexión alguna con nuestros pensamientos, nuestras figuraciones y nuestras valoraciones? • Proust lo niega, denominando a las emociones «levantamientos geológicos del pensamiento»." En otras palabras, lo que transforma la llanura de la mente del barón en una cordillera no es ninguna sacudida subterránea, sino los pensamientos que alberga acerca de Charlie Morel, una persona que de repente se ha vuelto crucial para su bienestar y a quien ve como inescrutable, poco fiable y completamente fuera de su control. Son estos pensamientos acerca del valor y la importancia los que hacen que su mente se proyecte al exterior como una cadena montañosa, en lugar de permanecer inmóvil e inerte, cómodamente satisfecha de sí misma. (p. 21) ¿A quién se enfrenta la autora? • A cualquier forma de dualismo que separa tajantemente pensamiento y emociones. • A cualquier visión mecánica y causalista de la vida emocional que es “racionalizada” por el pensamiento. • Que considera las emociones como contenidos irracionales, inconrtrolables y completamente separados del pensamiento, el juicio y la ética • Que considera las emociones simplemente como un motor de la actividad humana, sin orientación, incapaz de decirnos cualquier cosa de nosotros o del mundo. Sin contenido. Tesis central 1: emociones parte del pensamiento • “Hay mucho en juego en la decisión de considerar de esta forma las emociones, como una respuesta inteligente a la percepción del valor. • Si las emociones están imbuidas de inteligencia y discernimiento y si contienen en sí mismas conciencia de valor e importancia, no pueden, por ejemplo, dejarse fácilmente a un lado a la hora de dar cuenta del juicio ético, como ha sucedido a menudo en la historia de la filosofía. • En lugar de concebir la moralidad como un sistema de principios que el intelecto imparcial ha de captar y las emociones como motivaciones que apoyan o bien socavan nuestra elección de actuar según esos principios, tendremos que considerar las emociones como parte esencial del sistema de razonamiento ético. “ (21- 22). Tesis central 2: emociones cognitivo evaluativas • Las emociones, no son fuerzas que nos mueves ciegamente y que se oponen al pensamiento. • Las emociones son parte del pensamiento, son en algún sentido “inteligentes”. • Nos ubican en el mundo, dan relieve y nos entregan una geografía de nuestro paisaje humano individual y social. • Involucran una valoración del objeto y del entorno, por lo que tienen una gran importancia en la vida moral ( implican un valor). • Involucran incluso una cierta forma de juicio, de razonamiento ético básico, sobre los objetos, tienen contenido cognitivo. • Dicen algo sobre el sujeto que las siente, de sí mismo sus valores y su idea de bien eudaimonista. Advertencia: • “Afirmar que las emociones han de formar parte relevante del contenido de la filosofía moral no supone afirmar que ésta deba conceder a las emociones una confianza privilegiada o considerarlas inmunes a la crítica racional, dado que pueden no ser más fiables que cualquier otro conjunto de creencias arraigadas. (…)Lo que significa es que no podemos ignorarlas, como tan a menudo ha hecho la filosofía moral. Significa que una parte central del desarrollo de una teoría ética adecuada será el desarrollo de una teoría apropiada de las emociones, incluyendo sus fuentes culturales, su historia en la primera infancia y en la niñez y su funcionamiento, en ocasiones impredecible y desordenado, en la vida cotidiana de los seres humanos que tienen apego a cosas que existen fuera de sí mismos.” (p.22) Vulnerabilidad (dependencia externa) y Eudaimonía • “Que supongan especies de juicio, supone también la valoración que hacemos de objetos externos, fuera de nuestro control, de los que depende nuestro bienestar (dependencia y necesidad) • Si éstas (las emociones) implican juicios acerca de la relevancia para nuestro bienestar de objetos externos incontrolados, juicios en los que la mente del sujeto que juzga se proyecta de manera inestable hacia un mundo exterior de objetos, habremos de ser capaces de imaginarnos esos apegos, su placer y su terror, su intensa e incluso obsesiva concentración en su objeto, si queremos hablar como es debido sobre el amor, el miedo o la ira. Y parece que tendremos motivos para acercarnos a textos como la novela de Proust, que alienten tales ejercicios de imaginación, profundizando y afinando nuestra comprensión de los levantamientos del pensar en nuestra propia vida.” (p. 23) Narración e historia de las emociones • Para acercarse a las emociones, ya que ellas se construyen en una historia del valor, individual y social, hay que acercarse narrativamente: • “En definitiva, no podemos entender el amor del barón, por ejemplo, sin conocer buena parte de la historia de pautas de relación que se remontan a su infancia. Los amores pasados proyectan su sombra sobre las relaciones presentes y se cobijan en su interior. Lo cual, a su vez, sugiere que para poder hablar apropiadamente de las emociones será necesario acercarse a textos que contengan una dimensión narrativa, profundizando y afinando así nuestro conocimiento de nosotros mismos en tanto portadores de una historia temporal compleja” . (p.24). El lugar de la literatura y el arte en la filosofía moral • “Por esta razón el narrador de Proust se convence de que ciertas verdades relativas al ser humano sólo pueden contarse de manera literaria. Si aceptamos su concepción de las emociones, debemos coincidir hasta el punto de conceder a la literatura (y otras obras de arte) un espacio dentro de la filosofía moral, al lado de textos filosóficos más convencionales. Una vez más: una explicación del razonamiento humano basada sólo en textos abstractos como los propios de la filosofía moral probablemente resultará demasiado simple para ofrecernos el tipo de comprensión de nosotros mismos que necesitamos” (p.23). Postura cognitivista no un complemento sino parte de la misma ética • “Pero si una teoría cognitiva-evaluadora de las emociones es correcta, estos postulados adquieren una importancia particular, pues significan que, si se omiten las emociones, se descuidará no un mero apéndice psicológico al pensamiento ético, sino una parte del propio pensamiento ético. Las emociones no son sólo el combustible que impulsa el mecanismo psicológico de una criatura racional, son parte, una parte considerablemente compleja y confusa, del propio raciocinio de esa criatura.” (p. 23) Consecuencias para la política • “..Una explicación teórica de las emociones no es sólo eso: tiene profundas consecuencias para la teoría de la razón práctica, para la ética normativa y para las relaciones entre ética y estética. Tal explicación tiene también consecuencias para el pensamiento político, pues la comprensión de la relación entre las emociones y las diversas concepciones del bien humano influirá en nuestras deliberaciones sobre cómo puede contribuir la política al florecimiento humano”. (p. 23) • “ (esta perspectiva nos entrega) razones especialmente poderosas para fomentar las condiciones del bienestar emocional en una cultura política, pues esta concepción implica que, sin desarrollo emocional, una parte de nuestra capacidad de razonar como criaturas políticas desaparecerá”. • ( p. 23) ¿Qué son las emociones? • “Las emociones son evaluaciones o juicios de valor, los cuales atribuyen a las cosas y a las personas que están fuera del control de esa persona una gran importancia para el florecimiento de la misma.‘ • Contiene tres ideas relevantes: - Las emociones contienen juicios o valoración con contenido cognitivo. La emoción es: “valoración general de algo como importante para el bienesta r propio”. - Las emociones nos señalan del florecimiento propio o de los propios objetivos y proyectos importantes. - Las emociones nos señalan la relevancia de los objetos externos tienen para nuestra propia realización eudaimonista. Objetos que se encuentran fuera del control del individuo (p. 24) Itinerario propuesto para el libro • De una concepción estoica a una neoestoica • 1. Exposición de la noción de emoción: • En la primera parte del libro expondré una concepción de las emociones que desarrolla la intuición contenida en la descripción de Proust, sugiriendo que diversos fenómenos de nuestra vida emocional se explican correctamente mediante una perspectiva cuyos antecedentes son las ideas de los estoicos de la Grecia antigua. Este planteamiento sostiene que las emociones son evaluaciones o juicios de valor, los cuales atribuyen a las cosas y a las personas que están fuera del control de esa persona una gran importancia para el florecimiento de la misma. Itinerario propuesto para el libro • 1.1. Mi estrategia es formular inicialmente esta concepción de una forma relativamente simple, proporcionándole una defensa preliminar (capítulo 1). • 1.2. Una vez considerada su estructura general, pasaremos a contemplar diversas modificaciones. Tales modificaciones no fueron realizadas por los propios estoicos. Mi concepción se afinará y reestructurará en cuatro etapas diferenciadas. Cuando hayamos acabado, quedará un núcleo general, pero será mucho más sutil de lo anunciado al comienzo. La concepción que surgirá puede denominarse con justicia neoestoica, y emplearé este término con frecuencia. Pero tiene un carácter independiente, que hace hincapié en la comunidad entre los humanos y otros animales, en el papel de las normas sociales y en la complejidad de toda historia humana individual. (p.25) Itinerario propuesto para el libro • En este desarrollo se abordarán asuntos de los que no sabemos si los estoicos se ocuparon. Será necesario considerar el papel de la imaginación en los diversos tipos de emociones. Tendremos que distinguir entre emociones generales y particulares, y entre emociones «de fondo» y «de situación». Deberemos preguntarnos cómo explicar la disminución de la aflicción con el paso del tiempo dentro de una teoría cognitivo-evaluadora. Será necesario examinar con detenimiento si todas las evaluaciones implicadas en la emoción se relacionan efectivamente con «bienes externos» no controlados y si siempre se valora el objeto de la emoción porque guarda alguna relación con el florecimiento propio. Itinerario propuesto para el libro • Y por último, será necesario dedicar mucha atención a la difícil cuestión de si, aparte de las actitudes cognitivas, existen otros elementos implicados en la emoción: sentimientos, movimientos corporales o percepciones densas que no se agotan en el contenido proposicional de la emoción. En la segunda mitad del primer capítulo comenzaré el afinamiento de la concepción estoica -o, como también podría decirse, la construcción de una concepción neoestoica contemporánea- trazando estas delimitaciones adicionales y enfrentándome a estas preguntas ulteriores. 2. En segundo lugar, toda concepción cognitivo-evaluadora contemporánea debe ofrecer una explicación verosímil de la relación entre las emociones humanas y las de otros animales. (p.25) Itinerario propuesto para el libro • En este punto de la argumentación nos encontraremos en disposición de debatir también acerca de tres distinciones importantes que nos ayudarán a trazar mejor la geografía de la vida emocional: distinciones entre las emociones y los apetitos, entre las emociones y los estados de ánimo y entre las emociones y los motivos para la acción. Al mostrar que nuestra concepción puede ofrecer una explicación adecuada de tales distinciones, reforzaremos nuestra hipótesis de que dicha concepción da cuenta correctamente de la experiencia de las emociones. (p. 26) Itinerario propuesto para el libro La tercera modificación importante a la que someteremos la concepción simple presentada al principio supone, pues, explorar estos asuntos ofreciendo una explicación razonable del papel que cumple la «construcción social» en la vida emocional. Los estudios antropológicos sobre la emoción nos han proporcionado un material muy rico sobre la variedad de las emociones que utilizaré en el tercer capítulo a fin de tratar estos asuntos (p. 26). Nuevos sujetos: la vida emocional y la ética de niños y animales • Los estoicos de Grecia y Roma no mostraron interés en la infancia ni se interrogaron en ningún momento acerca del modo en que las experiencias tempranas determinan la vida emocional de la madurez. De hecho, parecen haber sostenido el inverosímil punto de vista de que los niños, como los animales, carecen de emociones. Nosotros podemos advertir que se trata de un error, que los «levantamientos geológicos del pensamiento» que constituyen la experiencia adulta de la emoción suponen cimientos colocados en una época de la vida muy anterior, experiencias de apego, necesidad, placer y rabia. Los recuerdos tempranos proyectan su sombra sobre las percepciones posteriores de los objetos; las relaciones adultas contienen huellas de amores y odios infantiles (p. 26). La importancia de la imaginación para la ética • “Mi explicación de las emociones infantiles hace hincapié en el papel de la imaginación para conseguir una resolución positiva de las crisis emocionales tempranas. Mi exposición posterior de la compasión y del amor desarrolla esta noción, centrándose en el papel de las artes en el cultivo de dichas emociones”. (p. 27) Cuestiones metodológicas • Entonces, ¿cuál es el punto de partida de la investigación? Está claro que ha de ser la experiencia. (p. 29) • De manera similar, mi propia exposición asume la capacidad de los lectores de identificar y clasificar ejemplos de emociones tales como el sufrimiento, el temor y la envidia; a lo largo de todo el texto se consideran juicios intuitivos sobre estos casos junto a los resultados de la investigación filosófica y científica. (30)