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SEGUNDA PARTE

“VERBUM IN ECCLESIA”
«A cuantos la recibieron, les da poder
para ser hijos de Dios» (Jn 1,12)
Recordando OBJETIVO:
• “indicar algunas líneas
fundamentales para revalorizar la
Palabra divina en la vida de la Iglesia,
fuente de constante renovación,
deseando al mismo tiempo que ella
sea cada vez más el corazón de toda
actividad eclesial” (VD, 1).
ESQUEMA
VIDA

LITURGIA

PALABRA
EN
LA IGLESIA
1.-La palabra de Dios y la Iglesia
1.- La Iglesia acoge la Palabra
El Señor pronuncia su
Palabra para que la reciban
aquellos que han sido creados
«por medio» del Verbo mismo.
«Vino a su casa» (Jn 1,11).
El verdadero rostro de la Iglesia es ser la
presencia definitiva de Dios entre los
hombres en Cristo (Palabra del Padre).
• Todo se realiza en el acto de recibir la Palabra.
• No recibirla = no escuchar su voz, no
configurarse con el Logos.
Recibirla = aunque el hombre, sea frágil y pecador,
si sale sinceramente al encuentro de Cristo,
comienza una transformación radical: «A
cuantos la recibieron, les da poder para ser hijos
de Dios» (Jn1,12)
Estos son los que creen, los que viven la
obediencia de la fe.
• La Iglesia es
la shekiná, la casa
de la Palabra.
2.- Contemporaneidad de Cristo en la
vida de la Iglesia
Gracias al poder de Palabra de Dios y
a la acción sacramental, Jesucristo, es
contemporáneo a los hombres en la
vida de la Iglesia.
• «yo estoy con vosotros todos los días,
hasta al fin del mundo» (Mt 28,20)
Dei Verbum 8: Dios… sigue conversando
siempre con la esposa de su Hijo amado;
La Esposa de Cristo, es sierva y
maestra de la Palabra en la
escucha.

• Orientación del PAPA:


“La Iglesia no vive de sí misma,
sino del Evangelio, y en el
Evangelio encuentra siempre de
nuevo orientación para su
camino”.
“Mi verdadero programa de
gobierno es no hacer mi voluntad,
no seguir mis propias ideas, sino de
ponerme, junto con toda la Iglesia, a
la escucha de la palabra y de la
voluntad del Señor y dejarme
conducir por Él, de tal modo que
sea él mismo quien conduzca a la
Iglesia en esta hora de nuestra
historia.” Benedicto en el día de su
inicio
“Sólo quien se pone primero a la
escucha de la Palabra, puede
convertirse después en su heraldo” (VD ).
Si la Iglesia es
La• casa de la
LA LITURGIA,
Palabra
LUGAR
• PRIVILEGIADO
• DE LA PALABRA
E
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1.- La Palabra de Dios en la
sagrada liturgia
• El lugar privilegiado con particular eficacia
donde Dios nos habla en nuestra vida, habla
hoy a su pueblo, que escucha y responde;
y el lugar donde constantemente es:
1.- proclamada,
2.- escuchada,
3.- interiorizada
4.- y comentada.
Todo acto litúrgico está por su
naturaleza empapado de la
Sagrada Escritura.
de ella se toman las lecturas que se explican en
la homilía;
de ella reciben su significado las acciones
y los signos;
Cristo mismo « está presente en su palabra,
pues es Él mismo el que habla cuando se lee en
la Iglesia la Sagrada Escritura ». (S.C. 7).
Exhortación:

“es necesario entender y vivir el


valor esencial de la acción
litúrgica para comprender la
Palabra de Dios…
en cuanto que la Palabra de Dios diviniza
la acción litúrgica y la Liturgia es el lugar
privilegiado para la lectura comprensión
de la Palabra de Dios
Exhortación:

“Exhorto a esforzarse en educar a


todos los fieles a gustar el sentido
profundo de la Palabra de Dios que
se despliega en la liturgia a lo largo
del año, mostrando los misterios
fundamentales de nuestra fe” (52).
2. La Sagrada Escritura y sacramentos
Así como el actuar propio de
Dios en la historia a través del
carácter performativo de la
Palabra misma:
Dios dice y hace es lo mismo
Existe entre la Palabra y gesto
sacramental el actuar mismo de Dios.
(“performativo” quiere decir “por el mismo hecho
de ser nombrada se convierte en acción”.)
De su relación con la
Eucaristía
1.su relación con la Palabra de Dios (54),
2.la Sacramentalidad de la Palabra (56),
aplicaciones concretas con el
3. Leccionario (57),
4. ministerio del lectorado (58) y
5. la homilía (59).
Existe una íntima unidad entre la Palabra
y la Eucaristía. Ejemplo: Jn 6 y Lc 24.
Sinonimia entre Alimento y Ley
entre Ley y Persona

En Lc 24: Junto Jesús los dos discípulos


comienzan a mirar de un modo nuevo
las Escrituras.
• La Palabra de Dios se hace
sacramentalmente carne en el
acontecimiento eucarístico.
–La kénosis de Jesús
• La Eucaristía nos ayuda a
entender la Sagrada Escritura, así
como la Sagrada Escritura, a su
vez, ilumina y explica el misterio
eucarístico.
4.- Sacramentalidad de la Palabra
Uno de los temas para ser estudiados
ulteriormente
Lo que se afirma genéricamente de la relación
entre Palabra y sacramentos, se ahonda

El origen de la sacramentalidad (gestos y


palabras en el tiempo y en el espacio) de la
Palabra de Dios, está precisamente en el
misterio de la encarnación:
«Y la Palabra se hizo carne» (Jn1,14).
Con el mismo cuidado de la
Presencia real de Cristo
bajo las especies del pan
y del vino consagrado hemos
de tener con la Palabra.

La proclamación de la Palabra de Dios en la


celebración comporta reconocer que es
Cristo mismo quien está presente y se dirige
a nosotros para ser recibido.
san Jerónimo: «… el cuerpo de Cristo y
su sangre es realmente la palabra de la
Escritura, es la enseñanza de Dios. Cuando
acudimos al Misterio [eucarístico], si cae una
partícula, nos sentimos perdidos. Y cuando
estamos escuchando la Palabra de Dios, y se
nos vierte en el oído la Palabra de Dios y la
carne y la sangre de Cristo, mientras que
nosotros estamos pensando en otra cosa,
¿cuántos graves peligros corremos?».
• Depósito físico de la Palabra de Dios :
• LECCIONARIO:
• comprensión de la unidad del plan
divino, mediante la correlación entre las
lecturas del Antiguo y del Nuevo Testamento,
centrada en Cristo (DV 57).
• Exhort. Ayudar a comprender el nexo entre las
lecturas propuestas con el Leccionario.
6.- Proclamación de la Palabra y
ministerio del lectorado
• mayor cuidado en la proclamación de la
Palabra de Dios.[204]
• Cuidar el ejercicio del
• Lector con una formación adecuada.

• Aunque no hayan sido instituidos, sean


realmente idóneos y estén seriamente
preparados: bíblica y litúrgica, como técnica
• «La instrucción bíblica percibir el sentido de las
lecturas en su propio contexto y para entender a
la luz de la fe el núcleo central del mensaje
revelado.
• La instrucción litúrgica: percepción del sentido y
de la estructura de la liturgia de la Palabra y las
razones de la conexión entre la liturgia de la
Palabra y la liturgia eucarística.
• La preparación técnica: aptos para el arte de leer
ante el pueblo, ya sea de viva voz, ya sea con
ayuda de los instrumentos modernos de
amplificación de la voz».
7.- Importancia de la homilía
• Finalidad: favorecer una mejor
• comprensión y eficacia (poder) de la
• Palabra de Dios en la vida de los fieles.

• Buscar explicar claramente su mensaje y


luego seguir con la aplicación a la vida.

• Debe apuntar a la misión.


1.- Homilías genéricas y


abstractas.
2.- inútiles divagaciones.
Exigencias del predicador:
1.- “familiaridad y trato asiduo con el
texto sagrado;
2.- Transmitir la sencillez de la Palabra.
3.- meditación y la oración, para que
prediquen con convicción y pasión” (n.
59).
4.- lo que interesa es mostrar a Cristo,
el centro de toda homilía.
Exigencias del predicador:
5.- Cuestionarse:
¿Qué dicen las lecturas proclamadas?
¿Qué me dicen a mí personalmente?
¿Qué debo decir a la comunidad, teniendo en cuenta su situación concreta?».
6.- «ser el primero en dejarse interpelar
por la Palabra de Dios que anuncia»
7.- Cuidar homilía dominical y
solemnidades como en Misas durante
la semana.
8.- Oportunidad de un Directorio
homilético
En el sacerdote de Cristo la mente y la
palabra han de ser concordes

De san Jerónimo «Que tus actos no


desmientan tus palabras, para que
no suceda que, cuando tú predicas
en la iglesia, alguien comente en sus
adentros: “¿Por qué, entonces,
precisamente tú no te
comportas así?”...
9.- La Palabra y los sacramentos
de curación
• 1.- La Palabra de Dios
• reconciliación de Dios
• (cf. 2 Co 5,18-20; Ef 1,10).
• El perdón misericordioso, encarnado
en Jesús, levanta al pecador».
• No descuidar la referencia a la Sagrada
Escritura en estos sacramentos.
Exhort.
• que cada penitente se prepare a la
• confesión meditando un pasaje
• adecuado y comience la confesión
mediante la lectura o la escucha de una
monición bíblica.
después su contrición, conviene que el
penitente use una expresión,
«compuesta con palabras
de la Sagrada Escritura».
Exhortaciones sobre la unción
• «La fuerza de la Escritura con numerosos
textos de consuelo, ayuda y curaciones
debidas a la intervención de Dios… es una
llamada a una constante conversión personal
del oyente».
1.- Recordar la cercanía de Jesús a los que
sufren, para darle un sentido a la
enfermedad y a la muerte.
2.- se ayude a vivir con fe su propio estado de
padecimiento unidos al sacrificio redentor de
Cristo
10. Palabra de Dios y Liturgia
de las Horas
• «pone en contacto a los fieles con la Sagrada
Escritura y con la Tradición viva de la Iglesia».
es “la voz de la misma Esposa que habla
al Esposo; más aún: es la oración de
Cristo, con su cuerpo, al Padre”»

• Manifiesta el ideal cristiano


de santificar todo el día.
• Consagrados: vivan con fidelidad este
compromiso en favor de toda la Iglesia.

• Que se difunda más en el Pueblo de Dios este


tipo de oración, especialmente la recitación
de Laudes y Vísperas.
• se preste atención
al espacio previsto para la
proclamación, la escucha y la explicación de la
Palabra de Dios mediante breves moniciones.
• la bendición toma su pleno sentido y eficacia
de la proclamación de la Palabra de Dios,
cuyo nacimiento proviene del pueblo de DIos.
• Con el fin de favorecer cada vez
más en el Pueblo de Dios una
mayor familiaridad con la
Palabra de Dios en el ámbito
de los actos litúrgicos.
a) Celebraciones de la Palabra de Dios

• “ocasiones privilegiadas de encuentro con el


Señor”
• por la escasez de sacerdotes.
• que alimente la fe de los creyentes, evitando,
que ésta se confunda con las celebraciones
eucarísticas;
• «deberían ser ocasiones privilegiadas para
pedir a Dios que mande sacerdotes santos
según su corazón».
b) La Palabra y el silencio
• el valor del silencio: la palabra sólo puede ser
pronunciada y oída en el silencio, exterior e
interior para ser acogida en el corazón

• los misterios de Cristo están unidos al


silencio y sólo en él la Palabra puede
encontrar morada en nosotros.
c) Proclamación
solemne de la
Palabra de Dios
en las solemnidades
litúrgicas relevantes,
especialmente el Evangelio.
• El saludo, el anuncio inicial: «Lectura del santo
evangelio...», y el final, «Palabra del Señor»,
• Es bueno cantarlos.
d) La Palabra de Dios en el templo cristiano
• Que sea lugar adecuado que pueda ayudar a
una mayor atención.
• Cuidar la acústica.
• el ambón, fijo representa la presencia de
• Cristo “que permanece eternamente” (DV 26) y
en armonía con el altar, sea visualmente el sentido
teológico de la doble mesa de la Palabra y de la
Eucaristía.
• Se sugiere fuera de la
celebración, se destine
en un lugar visible y de
honor en el templo
donde se coloque la
Sagrada Escritura sin
ocupar el centro.
e) Exclusividad de los textos bíblicos
en la liturgia
• «Ningún texto de espiritualidad o de
literatura puede alcanzar el valor y la riqueza
contenida en la Sagrada Escritura, que es
Palabra de Dios».
• nunca sean sustituidas por otros textos.
• El Salmo responsorial es Palabra de Dios, con
el cual respondemos a la voz del Señor ;
• no debe ser sustituido por otros textos; es
muy conveniente, que sea cantado.
f) El canto litúrgico bíblicamente
inspirado
• Acompaña a los actos litúrgicos y muestran sensiblemente al
invisible y el inaudible misterio de Dios.
• De inspiración bíblica y que exprese mediante una
concordancia armónica entre las palabras y la
música, la belleza de la palabra divina.
• cantos de la tradición de la Iglesia y el canto gregoriano-
g) Especial atención a los
discapacitados de la vista y el oído
• ayuden con instrumentos adecuados a los
hermanos y hermanas que tienen esta
dificultad, para que también ellos puedan
tener un contacto vivo con la Palabra de Dios.
La palabra de Dios
en la vida eclesial
1.-Encontrar la Palabra de
Dios en la Sagrada Escritura
• La vida cristiana se caracteriza
esencialmente por el
encuentro con Jesucristo que
nos llama a seguirlo
• expreso el vivo deseo de que florezca «una
nueva etapa de mayor amor a la
Sagrada Escritura por parte de todos los
miembros del Pueblo de Dios, de
manera que, mediante su lectura orante
y fiel a lo largo del tiempo, se
profundice la relación con la persona
misma de Jesús» No. 72
• conocer la Escritura para crecer en el amor de
Cristo.
• Si el centro de la vida espiritual es el
encuentro con Cristo, renovemos el
compromiso de profundizar en la
• palabra que Dios podremos aspirar
• así a ese «alto grado de la vida
• cristiana ordinaria».
2.- Promover la animación
bíblica de la pastoral
• Para resaltar la centralidad de la Palabra de
Dios en la vida eclesial: «incrementar la
“pastoral bíblica”, no en yuxtaposición con
otras formas de pastoral, sino como
animación bíblica de
toda la pastoral».
• No se trata de añadir algún
• Encuentro bíblico a la parroquia.
• El sentido enfático, “toda”, pide animación
bíblica de toda la pastoral.
• = que las actividades habituales de las
comunidades cristianas, las parroquias, las
asociaciones y los movimientos, se interesen
realmente por el encuentro personal con
Cristo que se comunica en su Palabra.
• Para que llegue a ser realidad la
Palabra de Dios en el corazón de
toda actividad eclesial y hacer un
constante renovamiento eclesial:
es necesaria una adecuada formación
bíblica en todos los niveles.
• mejor modo para afrontar la
proliferación de sectas
• se favorezca también la difusión de
pequeñas comunidades círculos
bíblicos formadas por familias .
3. Dimensión bíblica de la catequesis
• La catequesis en sus diversas formas y fases,
ha de acompañar siempre al Pueblo de Dios.
• comporta un acercamiento a las Escrituras en
la fe y en la Tradición de la Iglesia, de modo
que se perciban esas palabras como vivas, al
igual que Cristo está vivo.
Desafíos de la catequesis
1.- «ha de estar totalmente impregnada por el
pensamiento, el espíritu y las actitudes
bíblicas y evangélicas, a través de un contacto
asiduo con los mismos textos;
2.- más rica y eficaz cuanto más lea los textos
con la inteligencia y el corazón de la Iglesia.
3.- conocimiento de las figuras,
• de los hechos y las
• expresiones fundamentales
• del texto sagrado
4.- memorización de algunos
pasajes bíblicos;
5.- debe comunicar de manera
vital la historia de la salvación y
los contenidos de la fe de la
Iglesia
4. Formación bíblica de los cristianos

• que los cristianos, y en particular los


catequistas, tengan una adecuada
formación.
• se ha de prestar atención al apostolado
bíblico
• se establezcan centros de formación para
laicos y misioneros, en los que se aprenda a
comprender, vivir y anunciar la Palabra de
Dios
5. La Sagrada Escritura en los grandes
encuentros eclesiales
• se subraye más la importancia de la Palabra de
Dios, de la escucha y lectura creyente y orante
de la Biblia.
6. Palabra de Dios y vocaciones
• Profundicen su relación con la Palabra de Dios
en cuanto bautizados, pero también en cuanto
llamados a vivir según los diversos estados de
vida.
• En la Sagrada Escritura es donde
encontramos revelada nuestra vocación a la
santidad
a) Palabra de Dios y ministros ordenados
• el Obispo ha de poner siempre «en primer
lugar, la lectura y meditación de la Palabra de
Dios.
• Antes de ser transmisor de la Palabra tiene
que ser oyente de la Palabra.
• Ha de estar como “dentro de” la Palabra,
para dejarse proteger y alimentar como en un
regazo materno” (n. 79).
• Sacerdotes: «no le basta conocer lingüística o
exegésis, necesario; necesita acercarse a la
Palabra con un corazón dócil y orante, para
que ella penetre en sus pensamientos y
sentimientos y engendre dentro de sí una
mentalidad nueva: “la mente de Cristo” (1 Co
2,16)».
• Diaconado: «De la Palabra de Dios, está
llamado a ser mensajero cualificado, creyendo
lo que proclama, enseñando lo que cree,
viviendo lo que enseña»
• que los diáconos cultiven en su
• propia vida una lectura creyente
• de la Sagrada Escritura con el estudio
• y la oración.
b) Palabra de Dios y candidatos al
Orden sagrado
• 1.- Deben aprender a amar la Palabra de Dios
• 2.- Ha de ser el alma de su formación teológica
• 3.- Llamados a una profunda relación personal
con la Palabra de Dios, especialmente en la
lectio divina.
• 4.- El estudio les ha de hacer más conscientes a
una actitud de respuesta orante a Dios que
habla.
• 5.- se oriente a un estudio mediante métodos
que favorezcan este enfoque integral.
c) Palabra de Dios y vida consagrada

• el vivir siguiendo a Cristo casto, pobre y


obediente, se convierte «en “exegesis”
viva de la Palabra de Dios».
• lectio divina.
• formación sólida para la lectura creyente de
la Biblia.
d) Palabra de Dios y fieles laicos
• Se ha de formar a los laicos a
discernir la voluntad de Dios
mediante una familiaridad con la
Palabra de Dios, leída y estudiada
en la Iglesia, bajo la guía de sus
legítimos Pastores.
e) Palabra de Dios, matrimonio y
familia
• «con el anuncio de la Palabra
• de Dios la familia cristiana
• tiene claro su verdadera
identidad, lo que es y debe ser según el plan
del Señor».
• La Palabra de Dios está en el origen del
matrimonio (cf. Gn 2,24): el ser “una
carne”
• La Palabra de Dios reafirma la
bondad originaria del hombre,
creado como varón y mujer, y
llamado al amor fiel, recíproco y
fecundo.
• “… la fidelidad y la unidad de la vida de
familia, es un de la Palabra de Dios ante los
hijos.”
• “…que cada casa tenga su Biblia
y la custodie de modo decoroso,
de manera que se la pueda leer y
utilizar para la oración.” (85).
• Las mujeres: papel indispensable de las
mujeres en la familia, la educación, la
catequesis y la transmisión de los valores.
• «ellas saben suscitar la escucha de la Palabra,
la relación personal con Dios y comunicar el
sentido del perdón y del compartir
evangélico», así como ser
portadoras de amor y de la
humanidad.
Lectura orante de la Sagrada
Escritura y «lectio divina»

san Agustín: «Tu oración es un coloquio


con Dios. Cuando lees, Dios te habla;
cuando oras, hablas tú a Dios»
Orígenes está convencido de que la vía
privilegiada para conocer a Dios es el amor, y
que no se da una auténtica scientia Christi sin
enamorarse de Él.
• «capaz de abrir al fiel no sólo el tesoro de la
palabra de Dios, sino también de crear el
encuentro con Cristo, Palabra divina y
viviente»..
Pasos fundamentales de la Lectio Divina:
1. Lectio 4.Contemplatio
conocimiento de su contenido aceptamos como don de Dios su propia
¿Qué dice el texto bíblico en sí mismo? mirada al juzgar la realidad
¿Qué conversión de la mente, del corazón y de
la vida nos pide el Señor?
2. Meditatio
debe dejarse interpelar y examinar
¿Qué nos dice el texto bíblico a nosotros? 5. Actio
mueve la vida del creyente a convertirse
en don para los demás por la caridad.
3. Oratio
oración como petición, intercesión, agradecimiento y
alabanza, primer modo con el que la Palabra nos cambia.

¿Qué decimos nosotros al Señor como respuesta a su


Palabra?
• Recordar que la lectura personal de la
Escritura, según las disposiciones habituales
de la Iglesia, puede obtener indulgencias,
tanto para sí como para los difuntos.
Palabra de Dios y oración mariana
• Invito a promover las plegarias marianas,
como una ayuda para meditar los santos
misterios narrados por la Escritura.
• El rezo personal y comunitario del santo
Rosario, con breves pasajes de la Biblia
• el rezo del Angelus Domini permite
«rememorar cotidianamente el misterio del
Verbo Encarnado»
• El Akathistos y a la Paraklesis
Palabra de Dios y Tierra Santa
( el quinto evangelio)
• El Verbo se ha encarnado por
obra del Espíritu Santo en un
momento preciso y en un
lugar concreto.
• Las piedras sobre las que ha
caminado nuestro Redentor
están cargadas de memoria
para nosotros y siguen
“gritando” la Buena Nueva.
• Es meta de peregrinación
del pueblo cristiano, como
gesto de oración y
penitencia.

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